Nokta es una columna cultural semanal, se publica todos los viernes en Sección Acentos de Tribuna del Yaqui. 

Estoy leyendo dos libros de Kafka. El super hit ¨Metamorfosis¨ y ¨La Muralla China y otros cuentos¨. Déjeme le explico, no es que yo sea muy buena para leer, lo que pasa es que si no es poesía, yo tardo mucho para avanzaren un libro y sufro de desviación mental, es decir, para efectos de esta columna en el aquí y el ahora significa que se me complica el asunto de concentrarme, por eso, malamente salto de un libro a otro sin haberlo terminado, y aún peor, siempre leo la página final primero. De esa manera sé que es lo que me espera y se me quita la angustia, además que puedo comprender mejor al autor a través de esa frase final… bueno, esta vez, estoy leyendo a Franz Kafka.
Ubiquémonos en 1901, en la plena adolescencia del autor. Luego la primera guerra mundial en 1914. Metamorfosis fue realizada en 1915 y el cuento de la Muralla China en 1917. Ahí estaba yo, sentada en el piso de Libros Y Más decidiendo entre comprar la versión de $16.00 o la de $99.00 pesos de Metamorfosis. Kafka casi regalado.

La Real Academia de la Lengua Española, tiene registrado el adjetivo¨Kafkiano¨ el cual indica que algo es absurdo o angustiante. Ilusamente, creí que leer el libro de La Metamorfosis iba a ser algo excitante para mí, ya que había escuchado a todo mundo ¨Kafka para acá, Kafka para allᨠy creí que me iba a topar con el efecto del rockstar donde todo mundo obtiene algo que contar cómo ¨Oh sí, entiendo perfectamente la figura literaria de esta obra, me parece sumamente interesante lo que conlleva bla, bla, bla… ¨ Y lo que realmente me ha sucedido es algo muy triste….

No ha habido página alguna en la que no deje de pensar en mi padre y en sus últimos años de vida. La Metamorfosis, esta famosa novela existencialista, se perfila sobre el individuo frente a la sociedad, en especial en la familia. También dicen que es una especie de biografía del autor. El problema para mí con las obras literarias existencialistas es que me tocan fibras que a veces no quisiera remover.

Me siento un poco torpe para hablarles hoy, debido a que sí me ha movido fuertemente la novela.

Prefiero compartir un resumen de parte de Maria Villarreal, que encontré en su blog de reseñas literarias. Dice:

Luego de un sueño intranquilo, Gregorio despierta convertido en un insecto. Pese a ello, solo piensa en cómo cumplir con sus obligaciones laborales para mantener a su familia en ese nuevo estado. En consecuencia, su familia no logra asimilar la nueva condición de su hijo y se formulan preguntas respecto al futuro económico de la familia. Por las dificultades económicas, deciden alquilar una de las habitaciones para obtener entrada económica y reciben a tres huéspedes misteriosos quienes exigían vivir en un ambiente limpio.

Sin embargo, durante una noche en que Greta tocaba su violín, Gregorio apareció ante los huéspedes y en consecuencia, esto ocasiona que se fueran de la casa. Gregorio es obligado a regresar violentamente a su habitación.

En la oscuridad de su cuarto, Gregorio reflexiona respecto a los problemas que causa su existencia al interior del hogar. Gregorio entra en una rápida y profunda depresión que, sumado a la herida mal cicatrizada de la manzana arrojada por su padre, lo hace pensar constantemente en su final.

En consecuencia esto ocasiona su muerte a la mañana siguiente…

Si este fin de semana desean ingresar a las profundidades de su mente y su alma, si consideran que están listos para enfrentar fantasmas propios y ajenos, busquen leer La Metamorfosis de Kafka.

Si por el contrario están sensibles o deprimidos, no lo lean.

Yo inicié muy confiada la lectura y realmente, la narración hace que casi huela el aroma del cuarto de Gregorio y mi rostro al escribirles en este momento es más serio y sin sonrisa.

Realmente, el arte puede hacer cosas sumamente poderosas en las almas.

He cerrado el libro y no sé cuando lo lea completo.

Por otro lado, no sé si pueda olvidar pronto el cuarto de Gregorio que me he dibujado en la mente. Es un tanto incómodo cuando el arte te enfrenta con tus lados oscuros. Yo sabía que esto de hablar de Kafka no iba a terminar muy bien por algo… pero ahí va una, a hacerse la que todo lo puede…

Que tengan buen fin de semana…  cuidado con lo que decidan leer, que se pueden desatar varias cosas que uno pensaba ya tenía guardadas.

 

Erika Tamaura Libros, Literatura, nokta , , , ,

2 Replies

  1. Como bien dices (ya Dalí había puesto el dedo en la llaga respecto a los alcances del arte con aquella frase “El arte también es eso que te da una bofetada, te hace poner cara de asco y puede incluso hacerte vomitar”) La Metamorfosis es una obra no apta para cualquier alma. Me refiero no al nivel de intelecto que uno pueda tener o no tener como para entender esas cuestiones existenciales que Kafka desnuda. No. Me refiero a que habemos espíritus cuya sensibilidad es mayor (existe el concepto de “umbral de dolor” para referirse a qué tanto puede tu cuerpo soportar dolores como una perforación o un tatuaje, que usaré para trasladarlo al del alma).. existen o existimos almas cuyo “umbral de dolor” es menor y, por tanto, obras de arte (sea literatura, poesía, pintura, música, danza) nos llegan a fibras más delgadas. No cualquiera puede leer a Kafka, y en especial La Metamorfosis, y -habiéndolo entendido más allá de un tipo que se transforma en bicho- salir ileso emocionalmente. Una de dos: o no lo entiendes y no pasa nada, cierras el libro como otro cuento más y tu vida sigue; o lo entiendes al grado de hacerlo tuyo, sentirte Gregorio Samsa y envolverte en el filo de ese existencialismo visceral kafkiano. Si La Metamorfosis removió tu interior, “Carta al padre” es una obra aún más filosa, aunque probablemente tenga un impacto mayor en el lector masculino, por obvias razones. Leer a Kafka en la adolescencia es peligroso, así como leer “El Lobo Estepario” y “Demian” de Herman Hesse. Estos autores son, como todos los somos, hijos de su tiempo. Son el reflejo de la guerra que convulsionó a Europa y todas las secuelas que éstas dejaron. Te felicito por la columna. Saludos

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