Nokta, Hablemos de cultura es una columna semanal y se publica todos los viernes en Tribuna Sonora. 

Desautorizo
mi ternura /
vuélvanse
mis ojos
turbulencia /
pido castigo ejemplar
a mis palabras.
al alba
quito la escalera
para que ninguna luz
suba a las ventanas /
que sea
irreflexiva
como un perro
mi bondad
que en los charcos
sean glorificados
mis instintos
que la vida tropiece
y su pie herido
sea mutilado.
desautorizo
a mi sangre
y a mi sexo /
y para mis oídos
toda voz /
toda vez
toda sombra
todo siglo
sea mi espalda
una sábana
árida.
la ausencia es una unión definitiva.
todo
tengo prohibido:
incluso la amargura.

-Juan Bañuelos. Perversidad de la separación.

 

El pasado miércoles, iniciaron las despedidas. No recuerdo como se difundía la muerte antes de la digitalidad. Ahora, se citan Tweets y estados de Facebooks como fuentes oficiales para compartir los pésames y la ausencia.

Juan Bañuelos falleció a los 84 años, problemas respiratorios dicen. Entre su trayectoria, Juan Bañuelos fue reconocido con el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes en 1968 por Espejo humeante; el Premio Chiapas en la rama de Arte en 1984 por su destacada aportación a la lírica de México. También obtuvo el Premio Bellas Artes de Poesía Carlos Pellicer en 2001 por El traje que vestí mañana, así como el Premio Xavier Villaurrutia y el Premio de Poesía José Lezama Lima por A paso de hierba. Entre la obra de Bañuelos se encuentra: Puertas del mundo, en La espiga amotinada (1960); Escribo en las paredes en Ocupación de la palabra (1965); Espejo humeante (1969); No consta en actas (1971); Destino arbitrario (1982) y Donde muere la lluvia (1992).

Juan Bañuelos es considerado como una de las voces más poderosas de la poesía en lengua castellana y un hombre que pudo conjugar con sus letras el sentir popular a través de sus vivencias personales. Sus temas navegan entre el trabajo, el hambre, la explotación, el dolor, la belleza y la esperanza. El estilo de Juan Bañuelos fue vivo, sencillo y atemporal, capaz de sobrevivir a cualquier trampa del tiempo.

Juan Gelman se refirió al poeta de la siguiente manera: ¨Su palabra abraza a la Naturaleza para volverla infancia y devolverla al lugar que nadie puede escupir. Aquí asoma el prodigio: Bañuelos funde su mito personal con los mitos colectivos del pasado y en su materia irreductible encuentra brillos de futuro. Es, como quiso, agua para todos que nunca se agota. Sus imágenes tienen cara de recién sacadas de la tierra. Viven en estado constante de admiración, asombro y estupor. Estremece estas páginas una atención ética a “las luchas de los hombres y las batallas del espíritu”.¨

La ausencia es una unión definitiva… unámonos para siempre con el poeta, que vivirá por sus letras.

Este, es un fragmento del poema Turno de noche:

¨No es tan fácil volver la espalda al mundo

zumban las moscas cómo ahoga el hedor homicida

vengo de Acteal con los zapatos viscosos de sangre entre el polen del miedo

heridos desplazados

úmbricos inmóviles se comen su propio corazón

y aún así nunca crecerá en el suelo que pise un funcionario ni una brizna de hierba.

De la luz a la piedra de la nube al árbol de la sangre luz que hiere

monóloga sombra que con sus pies descubre alúcida la nada:

dormidos en el fondo del mar están los peces mudos

doblemente callados igual que tantos hombres sin dormir

en las excavaciones de las minas:

enorme insomne latido de la piedra de liquen sin edad de lo inerte a lo vivo

de reses minerales de un país oscuro y dividido

llamarada quietud latido insomne enorme que trasciende y nos despierta.¨

Buen viaje poeta. Gracias por las letras. Les deseo un buen fin de semana.

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