Refracción Una columna sobre periodismo, cultura y atardeceres en Sonora para Proyecto Puente y se publica todos los jueves.
Hace un par de días estaba viendo mi TimeLine de Twitter. Ya había visto la nota en el Día Internacional de la Mujer, pero no le había puesto atención, soy sincera. El Tweet decía: “¿Ya nominaste a una #Sonorense de 100? Quedan pocos días”.
Di click en el enlace y comencé a leer. El objetivo de la convocatoria “Sonorenses de 100” es integrar en su primera fase un grupo de 50 mujeres sonorenses destacadas para viajar a Estados Unidos y recibir capacitación en el seminario “Empoderamiento del Siglo XXI” en el Washington Center del 11 al 18 de mayo.
Hasta donde sé, el proceso es el siguiente: la página para registrar nominaciones de mujeres sonorenses en su Página Web Sonorenses de 100 puedes entrar ahí y apuntar a la mujer que consideres que puede participar en este proceso de capacitación para aportar después a las diversas comunidades en el estado compartiendo el conocimiento obtenido. Para esto, un jurado capacitado definirá el grupo que arrancará con esta primera etapa.
Esa es toda la información que tengo al respecto… no se menciona cuándo cierra la convocatoria ni cómo será la etapa después de las nominaciones para pasar al jurado, ni si es necesario entregar algún perfil o CV, pero puedo contarles mi percepción del proceso ya que me interesó muchísimo el proyecto y empecé a pedirle a mis contactos que me nominaran. Así es, se escucha raro, pero yo lo pedí. También les dije que si alguien les preguntaba que dijeran que a ellos solos se les había ocurrido la idea.
Me di cuenta de una cosa: el registro solicita información personal, como teléfono, edad, correo y dirección. El detalle que tuve con eso, es que no pude hacer invitaciones masivas porqué no estoy dispuesta a darle a todo mundo mi teléfono o mi dirección. Aparte, viene un espacio en blanco donde te pide que menciones la razón de la nominación.
Bueno, para mi propia sorpresa, me di cuenta, que tenía que hacer labor de casi uno a uno. Es decir, cómo no podía poner públicamente que me nominaran en mis redes por que no estaba dispuesta a dar mis datos personales a todos, resultó que me encontré entonces platicando uno por uno con mis amigas y amigos. Y empecé a darme cuenta de a quiénes si podía otorgarles mis datos con la confianza que no harían mal uso de ellos. Algunos de los que no leían bien el mensaje me decían “Déjame lo comparto en mi Facebook” y yo: “¡No!, porque para que me nominen tengo que dar mis datos personales y no quiero, te lo estoy pidiendo especialmente a ti por eso, por la confianza.”
Entonces, pensé que tal vez esta forma de nominación tan manual, aunque tardada, servía bien, porque quitaba un poco la dinámica masiva a la que estamos acostumbrados en estos procesos de votaciones online y nos obligaba a bajar el ritmo y de nuevo rescatar las formas de convivencia, incluso en redes.
Lo más emotivo, fue que algunas de mis amigas y amigos me mandaban las capturas de pantalla para que yo viera el mensaje que habían redactado en el espacio en blanco del porque me estaban nominando. Y debo confesarles que sí se le hace el corazón de gelatina a una con tanta buen vibra y cariño.
Uno de los mensajes que más tocó mi corazón y me tomó por sorpresa fue el que decía: “La conozco desde hace 17 años y es una mujer incansable, dispuesta a todo para lograr sus objetivos”. Sin duda, lo más valioso de la aventura de la vida, es poder llegar a tener personas a tu lado que puedan dar fe de tu verdadera esencia y que puedan recordártela.
En Sonora hay muchas mujeres que están dispuestas a dar su tiempo y esfuerzo para empoderar a otras. Para hacerlas brillar… porque como dice una muy buena amiga mía: cuando una mujer se encuentra bien, feliz y realizada, todo a su alrededor fluye. Pero cuando ella está mal, todo colapsa a su alrededor.
Invitados a nominar a su mujer sonorense más cercana, apapáchenla, motívenla. Díganle lo valiosa e importante que es para ustedes. No importa si no quedamos en las nominaciones. El gesto de reconocimiento puede iniciar a cerrar la brecha sobre el estado de las mujeres en Sonora.
Y si deciden nominarme, se los agradeceré en el alma, pero si no les conozco, no les puedo dar mis datos. Así que ciertamente hay ocasiones como ésta, en las que uno depende únicamente de su red de apoyo cercana, de su familia, de sus amistades y de aquellas relaciones en las que una ha sido bastantemente afortunada como para vivir en confianza, no importa si el tiempo de convivencia ha sido casi veinte años o desde el sábado pasado. Las conexiones permanecen sin importar el tiempo o la distancia. Y darse cuenta de eso es realmente maravilloso.
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