Cuando inicié a trabajar en ITSON, no comprendía el trabajo de Arteche. Me costaba comprender su obra. Me sigue costando algo de trabajo.
Del maestro sabía lo que me decían, lo que leía, lo que veía. Una vez me atreví a entrevistarlo. La verdad no me imaginé llegar a trabajar con él directamente.
Además de ser una persona sumamente inteligente. Tiene una energía fuertísima. Al comenzar a convivir con él casi a diario, entendí muchas cosas, me dí cuenta de porqué no entendía su obra hasta este momento y mi respeto por la palabra artista dió un giro de 180 grados.
Hoy no me toca hacer un ensayo de él, ya vendrá pronto el momento… Pero todo esto era para compartirles, que más valioso que su firma, la humildad del maestro dándome un “Gracias” que no tiene por que darme ya que la agradecida soy yo, tocó mi corazón y me emocionó… por que me recordó la belleza de la sencillez….y de la sinceridad.
Gracias maestro.
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