Esta semana inició la edición 43 del Festival Cervantino en Guanajuato. La atmósfera de este año gira en torno a la ciencia. 

¿Recuerdan que a inicios de 2015 hablábamos en este espacio sobre la declaración del año internacional de la luz por la UNESCO? Pues en este año se celebran varios aniversarios como el de los primeros estudios sobre óptica de Al-Haytham en el año 1015, durante la Edad de Oro Islámica, pasando por la naturaleza ondulatoria de la luz propuesta por Fresnel en 1815, la teoría del electromagnetismo propuesta por Maxwell en 1865, la teoría del efecto fotoeléctrico y la inclusión de la relatividad general y la luz en la cosmología, realizados por Einstein en 1905 y 1915, respectivamente, hasta llegar a los desarrollos de Charles Kao sobre la tecnología de fibra óptica en 1965. Bueno pues, que excelente oportunidad para celebrar la “Ciencia del arte. El arte de la ciencia” como eje rector de la programación del Festival Cervantino. 

Imaginen un concierto con proyección en pantalla gigante con imágenes tomadas por la NASA, pasando por la coreografía para bailarines y robtos de Blanca Li, hasta la exploración de la sintestesia por parte de Peter Brook… Además de intervenciones de premios Nobel de Física y Química como Smoot y Hoffmann, el estreno en México de la sinfonía “Doctor Atomic” de John Adams basada en la vida de Oppenheimer, el padre de la bomba atómica. 

El director general del Cervantino, el Dr. Jorge Volpi, menciona en su presentación del festival que “Un regimiento de destacados científicos nacionales e internacionales dialogarán y se batirán a duelo con los artistas invitados al Festival.” 

En lo personal me parece maravilloso que un Festival pueda tomar temáticas de reflexión, y en este caso, ¡la ciencia es una cosa explosiva! Cuántas veces hemos pasado por alto la parte crítica del arte, que maravillas escondidas están frente a nuestros ojos, y sobre todo, la delgada e imperceptible frontera entre la ciencia y el arte… y viceversa. 

“El Festival Cervantino se afianza como espacio de reflexión, convivencia y análisis crítico de la sociedad, a través de la acción y mirada de los artistas mexicanos y del mundo más relevantes de nuestra época. En tiempos difíciles-interesantes-, según la maldición china- el arte deja de lado su condición de entrenamiento para convertirse en una herramienta de cambio social, un espejo en el que se reflejan los desafíos y peligros que atravesamos y en un campo de experimentación para que los creadores y el público dialoguen y reflexionen sobre el presente.”

Esto es parte del texto que pueden leer en la página oficial del Festival en www.festivalcervantino.gob.mx y pueden seguir todas las actividades por sus redes sociales y Radio Educación estará transmitiendo, hay que estar al pendiente, hagamos nuestro trabajo de público y seamos parte de la vida cultural que nos rodea. No esperemos sentados. Si bien no podemos ir a Guanajuato algunos, prenda su compu o su móvil, y agende las cosas que desea ver y disfrutar, conozca más, investigue, búsquele. Tome su responsabilidad como público. 

A propósito: Dentro del programa del Cervantino, este próximo domingo se presenta el ensamble de Música Antigua Café Zimmerman, en ese ensamble participa el violinista Nicholas Robinson, quien estará en el concierto de gala de violín barroco que presentará la Orquesta Sonora Barroca bajo la dirección artística de Ariel Guerrero. 

El concierto es un esfuerzo de voluntades y es coordinado por la soprano Jannine Manz, quien hoy, cumple años. Felicidades amiga, que Dios te bendiga y te siga llenando de cosas hermosas y amor. 

Feliz fin de semana a todos. 

P.D. Gracias Anabel por traernos Revistas Cervantinas! 

Los espero en Twitter para seguir platicando y hablar del Festival Cervantino. Besos. 

   
    
    
    
   
 

 

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