Nokta, hablemos de cultura es una columna cultural semanal y se publica todos los domingos en Tribuna Sonora.
Hoy se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Danza. Por primera vez el Instituto Internacional del Teatro (ITI) ha publicado un mensaje para cada continente. El de América, ha sido configurado por Marianela Boan, de Cuba, y cuyo primer renglón es poderoso: “Tu cuerpo empieza antes que tú mismo y es el lugar de todos los rituales que te pertenecen.” Lee el mensaje completo aquí.
Al leer el mensaje de este año, tan místico, tan profundo y tan orgánico, no puedo sino pensar en la esencia de Marcelino Beltrán, bailarín, coreógrafo y maestro a quién se le entregará un reconocimiento por su trayectoria en la danza esta noche en el Festival Danza Cajeme 2018.
Marcelino ha sido reconocido por la comunidad de danza de Cd. Obregón, no sólo por su gran talento y su trabajo entregado durante décadas a la disciplina, sino que, quiénes hemos estado cerca de él, conocemos la entrega y el respeto con que ha construido su carrera ofreciendo todo su tiempo, toda su pasión y todo su amor por la danza a diversas generaciones de niños, jóvenes y adultos a través de su vocación como maestro.
Pero un bailarín siempre será un bailarín. Y los años han logrado que Marcelino Beltrán no solo se haya fortalecido, sino que también se ha consolidado como uno de los pilares de esta compleja labor que significa el tomar en sus hombros el compromiso de continuar dignificando la danza a través de su testimonio, su ejemplo y sobre todo, su trabajo sobre el escenario y las aulas de clase.
Y es que Marcelino, no solo es uno de los más talentosos bailarines que he conocido, es también uno de los mejores maestros y un gran coreógrafo que tiene aún mucho por compartir y decir, pero sobre todo, es uno de los espíritus más puros, más honestos y más libres que he visto para la danza en mi tierra. Enhorabuena por este reconocimiento mi hermano querido. Viva la danza.
